Destacado

Introducción

Se puede reconocer en el campo de la cultura una dinámica en la que tienen una presencia destacada voluntades diversas, que realizan prácticas en el espacio público con intereses también diferentes y que ponen en evidencia cómo la esfera de lo cultural, especialmente lo artístico, atraviesa otras esferas de la actividad humana y cómo a partir de esos desplazamientos se producen conflictos.
La intención de esta página es realizar un recorrido documental  alrededor del tema, analizar  y  visibilizar algunos casos, en los que emerge el conflicto entre la práctica artística y lo ideológico, tensionado por grupos religiosos lefebvristas, sedevacantistas o sectores conservadores de la población, dentro de la ciudad de Córdoba entre los años 1995 y 2015.  Los registros publicados muestran cómo ese conflicto reaparece en el campo del arte sistemáticamente y que, en la mayoría de los casos, las instituciones intentan evitar invisibilizándolo, acción que da cuenta de la fuerza de una tradición selectiva y sus mecanismos de exclusión dentro de las mismas.
Las acciones de determinados grupos, principalmente católicos sedevacantistas, o del poder político de turno, han impedido sistemáticamente la publicación de prácticas artísticas –censura mediante- como única solución a la confrontación de dos visiones diferentes de la cultura y del arte. La pregunta que queda flotando a partir de la actitud asumida por el Estado es si esta constituye la única respuesta posible en la gestión de políticas culturales públicas.
Las gestiones de los espacios expositivos en algunos casos ponen de manifiesto que la censura aplicada y justificada por los funcionarios cuando el escándalo transforma la suspensión de una muestra en un acontecimiento mediático, evidencia una política cultural supeditada a un mandato político- ideológico, que no es transparentado, impone un tipo de representación y es un mecanismo para la construcción de hegemonía cultural de los sectores de poder.

Casos relevados en el 2015 dentro del período 1995-2015:

CHANCHO CECOR

El día  10 de agosto de 1995 en la ciudad de Córdoba (Argentina) el colectivo integrado por las docentes  y artistas Cristina “Kiki” Roca, Marivé Paredes y Bibiana Oviedo y Alicia Rodríguez realizan una intervención urbana frente a la Casa radical. El objeto (una escultura de gran tamaño de un chanco alcancía con un bono Cecor en su ranura) es confiscado por la policía bajo el argumento de que podía contener explosivos. Las artistas presentan un habeas corpus para poder sacar la escultura de la cárcel  y la vuelven a colocar en el espacio público.

A este colectivo se las conoce  como Las Artistas del Chancho y el Corpiño: Marivé Paredes, Cristina Roca y Alicia Rodríguez, docentes de la Escuela Provincial de Bellas Artes “Dr. Figueroa Alcorta”, activas entre el ‘95 y el ‘97 con diez obras, seis de ellas en el ‘95, dos en el ‘96 y dos en el ‘97. Las últimas corrieron por cuenta de una sola de las integrantes, Cristina “Kikí” Roca.

Dice la docente e investigadora María Cristina Rocca que “En el año 1995, las artistas participaban del descontento generalizado de la población frente a las continuas evidencias de que el gobierno estaba vaciando las arcas públicas. En medio de esa tensión social provocada por el pago a los empleados públicos con “bonos”, las artistas en cuestión se preguntaban qué muestras de resistencia se podía hacer desde el arte en momentos en que el local del Partido Radical, de turno en el gobierno, había sido asaltado, saqueado y quemado por las protestas enardecidas de la población. Se decidieron por una escultura en pleno centro, frente a la Casa  Radical, con la forma de cerdito-alcancía de grandes dimensiones con un billete introduciéndose en la ranura, sobre el cual aparecía una foto sonriente de propaganda del gobernador Mestre, apodado “el Chancho”, con un escrito que decía: “bonocobrai”. La porcina escultura duró 20 minutos antes de que la policía la incautara por ser sospechosa de contener explosivos. Con esta intervención inesperada y la presentación de un “habeas corpus” para rescatar el Chancho comienza la historia pública de este colectivo. Lo que en otras circunstancias podría haber sido un pequeño incidente callejero cobró dimensiones impensadas por el clima de crisis y descontento popular y por la difusión en los diarios y la  TV. Inmediatamente, se explicitaron desde diversos sectores comentarios públicos de apoyo a unas artistas que en sorna, y explotando el absurdo, característico del humor cordobés, desmitificaban las declaraciones épicas y solemnes del gobierno anunciando el plan de ajuste. De esta forma, y durante dos largos años, el colectivo presentó obras en la calle como réplica al gobierno, resignificando satíricamente los horizontes discursivos del poder.”

Fuentes: Bicentenario – Arte, Ciudadanos y Fronteras – Goethe-Institut  

http://www.goethe.de/ins/ar/cor/prj/bic/vo4/es6909262.htm

la9idayvuelta.blogspot.com/2012/…/cristina-kiki-roca-y-las-chicas-del.ht…

MUESTRA HUMORES ORGÁNICOS

Muestra “Humores orgánicos”  del  Artista  Alfonso  Barbieri

En noviembre  1995, Alfonso Barbieri sufrió la censura de uno de los dibujos de la muestra «Humores orgánicos», en el Cabildo Histórico de la ciudad de Córdoba. En esa obra aparecían representados un hombre y una mujer  encerrados dentro de un corazón formado por preservativos. A las autoridades de Cultura de entonces les pareció «pornográfico», según manifestó el propio artista. En plena amenaza del SIDA como enfermedad  mortal  esa  imagen fue retirada de la muestra junto a cuatro dibujos más, según manifiesta en su artículo Damián Orosz.

La última tentación de Cristo

La proyección del film dirigido por Martín Scorsese fue censurada cuando la señal Space fue notificada de la decisión del juez federal Edmundo Carbone quien dictaminó la prohibición de «La última tentación de Cristo», a partir de la acción impulsada por tres estudiantes de la agrupación universitaria Santo Tomás Moro, en septiembre de 1996

“Vale destacar que este sabor amargo no es novedoso para Alfonso Barbieri, quien padeció la misma censura, en el año 1995, con su muestra “Humores Orgánicos” en el Cabildo Histórico de la Ciudad de Córdoba.

 

Las acciones violentas y públicas de los lefebvristas también tienen antecedentes en nuestra ciudad. La primera vez fue en 1996 cuando quisieron impedir la proyección de «La última tentación de Cristo» en la Universidad Nacional de Córdoba; y hace sólo unos años, a fines de 2004, cuando con la misma metodología irrumpieron en la muestra «Navidad, 10 artistas, 10 miradas», destruyendo obras que también consideraban ofensivas a sus imágenes sagradas y golpeando y amenazando a las personas presentes.

 

Están relacionados con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y el grupo «25 de marzo», promotor en los Tribunales Federales de Córdoba de una causa que pretende prohibir la fabricación y venta de todas las drogas anticonceptivas y de todos los DIU en todo el territorio nacional, por tener «efectos abortivos».

 

Aunque la Iglesia Católica, y en este caso puntual, la Acción Católica de Córdoba, se apresuren a distanciarse del accionar y pensamiento de los grupos lefebvristas, estos sectores fundamentalistas responden a los mismos criterios que la jerarquía y la ortodoxia religiosa, y en la actualidad, muchxs han interpretado las decisiones del reciente papado de Ratzinger, como la publicación del Motu Proprio en el que se aceptó nuevamente la celebración de la Misa en latín, entre otras cosas, como claras señales de acercamiento a estos grupos. La primera vez fue en 1996 cuando quisieron impedir la proyección de «La última tentación de Cristo» en la Universidad Nacional de Córdoba”

Fuente: Colectivo Indymedia Córdoba,

http://argentina.indymedia.org/print.php?id=525161

«Iconografía para baños», septiembre 2001

Intervención
Federico Del Prado
4- La intervención  “Iconografía para baños” de Federico del Prado, se realiza en el marco del Proyecto “Arte en el Mercado”, coordinado por Dolores Cáceres, en Ex Mercado Norte, cuya inauguración se concreta el 31 de septiembre, 2001. El funcionario a cargo del área le comunica a artista que debe sacar las fotografías que intervenían la entrada de los baños del viejo edificio. Las otras actividades planificadas se llevan a cabo.

Muestra “Asesinatos” de Juan Martín Juares

Villa Allende, 14 de agosto de 2004. 
La muestra (conformada por dibujos de pequeño formato) es aprobada por el Secretario de Cultura del Municipio de esa localidad;  pero el intendente Martínez decide suspenderla por considerar que los dibujos eran pornográficos. Esa suspensión adquiere repercusión mediática cuando los vecinos de la ciudad realizan una protesta junto al artista, el día 17 de agosto,  durante el acto conmemorativos de l aniversario de la muerte del General José de San Martín. En este caso llama la atención que la misma muestra, que molestó al funcionario municipal -en este caso  referido a la alusión en la representación de la sexualidad a los genitales-  fue realizada en Córdoba  con posterioridad sin ningún incidente. 

Navidad

Breve reseña:-Muestra “Navidad 10 artistas 10 miradas”, que surge de la convocatoria de la Secretaría de cultura de la Municipalidad de la Córdoba, en  la que participan diez artistas, invitados por  Graciela Castro y coordinados por la curadora Marcela Santanera.  La propuesta consiste en que cada artista visual realice en su producción una interpretación o lectura de tema de la Navidad. Los  convocados fueron  Marcos Acosta, Remo Bianchedi, Jorge Cuello, Onofre Fraticelli, Ana Gallici, Mario Grimberg,  Rubén Menas, Federico Schüle, Candelaria Silvestro  y Pablo Scheinbengraf.  La inauguración de la muestra estaba programada para la noche  del 20 de diciembre de 2004, en el Cabildo Histórico de ciudad de  Córdoba. Los grupos católicos fundamentalistas impiden el ingreso a la muestra. Los funcionarios Luis Gregoratti y Miguel Cabrera  a cargo del área comunican la decisión del intendente Luis Juez de suspender la muestra esa misma noche.
El caso estuvo en los medios durante casi 15 día.

«Tachitos» o «Hay mundo por poco tiempo»

Grupo Urbomaquia
Intervención urbana, ciudad de córdoba, 20 de mayo de 2005.
El Grupo Urbomaquia,  integrado por las artistas Magui Lucero,  Patricia Ávila, Liliana Di Negro, realza una intervención en el mobiliario de la ciudad, los cestos para residuos colocados en la peatonal de la ciudad de Córdoba,  el 20 de mayo de 2005. Las responsables  a pesar de la explicación dada por las docentes que participaban del proyecto,  son detenidas por la denuncia de un vecino a LV3 y detenidas y procesadas a partir de un cargo presentado en la justicia.  Artistas estudiantes y docentes de la Universidad Nacional de Córdoba concretan como forma de protesta por la censura y lo sucedido con posterioridad una «sentada frente a la legislatura provincial. Este hecho produjo un gran debate alrededor de los límites difusos entre arte/vida, como ambién también con respecto a la noción de espacio público. 

Muestra y presentación del libro «Dibujos 1990-2001″del artista visual y músico Alfonso Barbieri.

El 7 de junio de 2007 uevamente un grupo de católicos fundamentalistas impiden de manera violenta la inauguración de la Muestra y la presentación del libro «Dibujos 1990-2001» del artista visual y músico Alfonso Barbieri, en el Centro Cultural España-Córdoba, 7 de  junio de 2007. El Director del Centro cultural Daniel Salzano negocia con los líderes del grupo sedevacantista los hermanos Espina que impedían el ingreso del público,  pero éstos igualmente irrumpen en el espacio del centro cultural y ocasionan destrozos sobre el edificio y rompen las obras expuestas. Fueron detenidos por unas horas y la muestra debió suspenderse porque los dibujos fueron destruidos y el artista amenazado.
«Violencia y censura… en el nombre de Dios
Por Colectivo Indymedia Córdoba Thursday,
Jun. 07, 2007 at 12:04 PM
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Fanáticos religiosos impiden presentación de obra de Alfoso Barbieri
Violencia y censura… en el nombre de Dios
Ayer por la noche, cerca de las 19:30 hs, un grupo católico ortodoxo tomó violentamente el Centro Cultural
España Córdoba donde se realizada la muestra del pintor y músico Alfonso Barbieri.
Cuando lxs interesadxs estaban llegando a la hora convocada para la exposición, este conjunto Lefebvrista, del
ala de extrema derecha de la iglesia y seguidores de Julián Espina, irrumpió en el lugar destrozando vidrios de
ventanas. Vale aclarar que Espina habría sido invitado a la muestra por Daniel Salzano, director del Centro.
Al entrar en el centro cultural ordenaron a lxs presentes alinearse en una fila y lxs amenazaron de muerte. “los
vamos a matar uno por uno” dijo un abogado que acompañaba a lxs catolicxs. Paralelamente, estxs últimxs
comenzaron a romper los cuadros, que eran cerca de doce, y libros que se encontraban en la sala.
Javier Almeida, un concurrente que estaba disfrutando de la exposición, salió a la calle en medio del incidente.
Acto seguido muestra públicamente, a quienes no podían ingresar, un ejemplar del libro de Barbieri. Tal
expresión enfureció a un cura, quien le pegó a Almeida con un bastonazo en la cabeza.
“Esta gente entró y rompió todo, argumentando que le habían ofendido a la madre. Hubo gente lastimada, ellos
mismos se cortaban las manos para con esa sangre manchar las obras, decían que dejaban la sangre de los hijos
de dios” declaró Víctor, trabajador del CCEC.
Puertas afuera, el clima que se vivía era tenso. La minoría lefebvrista se mantenía agolpada a la puerta central
sin dejar pasar siquiera a la prensa. Mientras el público coreaba y exclamaba su bronca, ellos respondían con
14/7/2016 Violencia y censura… en el nombre de Dios : Argentina Indymedia (( i ))
rezos a la “Virgen María” y con pronunciamientos fascistas tales como “Viva Hitler”.
Cerca de las diez de la noche, cuando el grupo católico acababa de irse, Sergio Barbieri, padre de Alfonso, se
hizo presente en nombre de su hijo pidiendo a todxs que se fueran por que la obra no iba a exponerse ya que no
quedaba nada de ella.
“El cuadro que generó todo esto era una virgen inmaculada que tenía dos angelitos que orinaban sobre su
manto”, opinó el padre del artista.
Por otro lado, no hubo respuestas aún por parte de los directivos del CCEC. Quienes deberían accionar frente a
los daños ocurridos en nombre de este centro cultural que es patrimonio de la provincia. Cerrar las puertas y no
mostrar el daño ocurrido y los sobrantes de una obra luego de la represión ¿no es una vía más a una censura?.
Lo de siempre
Por su parte la valla de policías no abandonó su trabajo habitual y protegió a quienes violaron la libertad de
expresión. Según declaraciones policiales, hasta el momento no hay ningún imputado ni detenido por los graves
hechos ocurridos.
Antecedentes
Vale destacar que este sabor amargo no es novedoso para Alfonso Barbieri, quien padeció la misma censura, en
el año 1995, con su muestra “Humores Orgánicos” en el Cabildo Histórico de la Ciudad de Córdoba.
Las acciones violentas y públicas de los lefebvristas también tienen antecedentes en nuestra ciudad. La primera
vez fue en 1996 cuando quisieron impedir la proyección de «La última tentación de Cristo» en la Universidad
Nacional de Córdoba; y hace sólo unos años, a fines de 2004, cuando con la misma metodología irrumpieron en
la muestra «Navidad, 10 artistas, 10 miradas», destruyendo obras que también consideraban ofensivas a sus
imágenes sagradas y golpeando y amenazando a las personas presentes.
Están relacionados con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X y el grupo «25 de marzo», promotor en los
Tribunales Federales de Córdoba de una causa que pretende prohibir la fabricación y venta de todas las drogas
anticonceptivas y de todos los DIU en todo el territorio nacional, por tener «efectos abortivos».
Aunque la Iglesia Católica, y en este caso puntual, la Acción Católica de Córdoba, se apresuren a distanciarse
del accionar y pensamiento de los grupos lefebvristas, estos sectores fundamentalistas responden a los mismos
criterios que la jerarquía y la ortodoxia religiosa, y en la actualidad, muchxs han interpretado las decisiones del
reciente papado de Ratzinger, como la publicación del Motu Proprio en el que se aceptó nuevamente la
celebración de la Misa en latín, entre otras cosas, como claras señales de acercamiento a estos grupos.
Colectivo Indymedia Córdoba.»

Inapropiado /inapropiable 8 de marzo de 2012

Sala de exposiciones del Buen Pastor, Córdoba
Muestra «Inapropiada/inapropiable» a cargo de los artistas y curadores Sofía Chaij y Juan Manuel Burgos. 
Galería del Espacio cultural «Paseo del Buena Pastor» ciudad de Córdoba. 
 Después de casi un año de haber sido presentado el proyecto, el 8 de marzo de 2012 (día de la inauguración) la Directora de la galería (Sonia Leavi) les comunica a los artistas que la muestra no se inaugura si no se modifica ( había molestado a integrantes del personal del centro cultural y además podía generar reacciones violentas de sectores católicos). Los responsables de la propuesta deciden no realizarla bajo esas condiciones y publican una carta en «La voz del Interior» (Suplemento VOS) denunciando la situación.
Se transcribe la carta a continuación:
ARTES 07/03/2012 13:18
Juan Manuel Burgos y Sofía Chaij: «Dijimos no a la censura de contenido»
Juan Manuel Burgos y Sofía Chaij difundieron una carta sobre lo sucedido con la muestra dada de baja, «Inapropiada/inapropiable», en el Paseo del Buen Pastor.
A continuación, la carta publicada por Sofía Chaij y Juan Manuel Burgos:

Inapropiada para la familia, Inapropiable para la censura provincial
Desde de mediados de Agosto del año 2011 comenzamos a hablar con Sonia Leavi, responsable de la galería de artes en el espacio Paseo del Buen Pastor, sobre la posibilidad de efectuar una muestra para Marzo del 2012 con referencia al «mes de la mujer».
La invitación que se nos extendió tenía que ver, en los términos de la propia galerista, con realizar una exhibición «fuera de los lugares comunes que caracterizan este tipo de eventos». A nuestro entender se trataba de pensar el género (los géneros) en un sentido amplio, sin caer en los criterios esencialistas que convocan sólo a las hembras biológicas (aquellas que poseen vagina) de clase media/alta a expresarse respecto de sí mismas, y menos aun, a través de los medios codificados socialmente como femeninos: bordados, algodones, puntillas, asaderas de cocina y cajitas rosadas que perpetúan los estereotipos de lo que debe ser una mujer, lo que debe ser una artista y lo que debe ser una obra de arte de género, bajo las formas de lo doméstico, lo íntimo y lo privado.
Durante seis meses trabajamos en el diseño, la curación y el montaje de lo que dimos a llamar Inapropiada/Inapropiable, un proyecto estético-político que se extendía en tres direcciones: a) por un lado nos interesó rastrear los procesos centrífugos en los que la práctica artística y plástica se expande hacia las esferas de la cotidianeidad a partir de las voces de distintas feminidades lanzadas al espacio público en grafitis, consignas políticas, cartelería y panfletería distribuidas en marchas, radios abiertas, actividades políticas, en los encuentros nacionales de mujeres, en las marchas del orgullo y la diversidad, entre otras; b) en segundo lugar quisimos hacer más hincapié en aquellos puntos donde el significante mujer y los que de este se desprenden son puestos en tensión, las voces del activismo lésbico, del activismo travesti y trans, como las de quienes se identifican como trabajadoras sexuales y otros feminismos disidentes problematizando y reflexionando sobre el propio cuerpo, el deseo, la maternidad como destino, el aborto, los estereotipos sociales, el trabajo sexual, la prostitución, la trata de personas, femicidios, lesbicidios, travesticidios, el patriarcado, el machismo etc.; c) finalmente en un movimiento centrípeto, hacia el interior del campo del arte, fue de nuestro interés repensar los estilemas artísticos puestos en circulación y legitimadores del llamado arte político, es decir, reflexionar sobre las poéticas y los lenguajes utilizados en la construcción de estos dispositivos.
Nuestra metodología de trabajo consistió en recrear, a veces a través de un simulacro minucioso y otras a través de versiones libres, un repertorio amplio de las propuestas activistas relevadas. Nuestro principal objetivo era justamente extender este debate público al público, en un espacio público. Esto no significa que desconocemos los mecanismos de exclusión simbólica que existen en el Paseo Buen Pastor, somos conscientes del corte de clase y de la hostilidad policial que no sólo se asegura de mantener a las quinceañeras cuarteteras del otro lado de los restaurantes, o que impide a los hambrientos interferir en la realización de los deseos de los más pudientes extrayendo monedas de la fuente, sino que además ha reprimido en reiteradas ocasiones las demostraciones de afecto de parejas gays y lesbianas.
Aun con todo apostábamos a una resignificación del espacio. Creíamos potente optimizar nuestros recursos y valernos de nuestros privilegios para re-activar siquiera en un intersticio institucional las voces disidentes que nos interpelan en las calles y sostener dicha interpelación durante 20 días, ya no las tres o cuatro horas que dura una marcha.
Presentamos el proyecto curatorial en el mes de diciembre junto con el flyer de difusión que acompañaría la muestra, el cuál explicitaba claramente el carácter contestatario, revulsivo y empoderado de la misma. Un collage obsceno y una serie de insultos reapropiados que invocaban desde «barriobajera» y «sudaca» hasta «abortista» y «matamacho» fueron aprobados por la encargada de la galería y por el director del Paseo.
El día primero de Marzo comenzamos con el montaje de la muestra, que por su dimensión calculábamos que nos tomaría varios días, la hostilidad que recibimos en el trato de los guardias encargados de cuidar sala, administrativos, secretarios y de las mujeres encargadas de la limpieza, como algunas restricciones en cuanto al modo de montar las piezas no detuvo nuestra faena, aunque claro, lo de inapropiado que tenemos comenzaba a notarse. A la mañana siguiente recibimos un llamado de Sonia Leavi en el que nos decía que aunque no había tenido tiempo de ver todo lo que estaba montado, le había parecido muy burdo lo que vio, especialmente un cartel dorado que anunciaba «Y Dios creó a travestis y lesbianas. Amén». Nos dijo que el director del museo estaba «asustado por la muestra» que los católicos fundamentalistas «iban a destrozar el lugar», que nos «iban a echar a nosotros y a ella inclusive» si eso se exponía tal cual estaba. Además agregó que el Paseo es un espacio visitado por «La Familia» y por «niños» que debíamos pensar también en eso, que ella creía que íbamos a referirnos a la «equidad de género» y no a hacer tanto hincapié en las lesbianas y travestis, que había muy poco sobre «lo hetero».
Decidir entre aceptar la censura o dar de baja la muestra no es una elección en el sentido estricto del término. No decidimos no hacer la muestra, dijimos no a la censura de contenido, no estamos dispuestos a negociar cuáles consignas sí y cuáles no pueden aparecer en una muestra y menos aun basadas en la presión de grupos fundamentalistas o en los posibles daños que estos podrían causar, no estamos a favor de poner la mejilla para sus bofetadas y el temor de Dios es un valor cristiano al que no adherimos. Con respecto a que la muestra tiene poco de «LO» hetero nos interesa aclarar que la propuesta era sobre todo una interpelación al régimen heterosexual, entendido como un sistema político y económico de control de los cuerpos. En nuestros relevamientos del espacio público y de las intervenciones políticas de los últimos cinco años no encontramos ningún grafiti que diga «Los heterosexuales nos oponemos a que las travestis accedan al sistema público de educación y de salud» o «paquis por esfuerzo propio» o «Soy hetero, dependo económicamente de mi marido y trato de no hacerlo enojar para que no me pegue», de haber encontrado inscripciones semejantes sin dudas las hubiésemos incluido.
Nos agrede y ofende profundamente la violencia institucional y la falta de respeto hacia nosotros, hacia nuestro trabajo y hacia las personas convocadas para la inauguración y el desmontaje crítico de la muestra, ellxs son: La performer, poeta y cantante Susy Shock de Buenos Aires, el historiador y activista Lic. Mauro Cabral, la Dra. en artes Alejandra Perié, el filósofo Dr. Eduardo Mattio y la antropóloga Dra. Andrea Lacombe.
Más allá de las heridas narcisistas mencionadas anteriormente lo que en verdad nos preocupa y alerta es la Lesbofobia, la Transfobia, la Travestofobia y la Misoginia institucionales e institucionalizadas. Que la frase «Dios creó a Lesbianas y a Travestis» ofenda o moleste a «hombres y mujeres» y por tal motivo deba ser censurada es alarmante, denigrante y ofensivo. Si se trata de proteger y de respetar a la familia, a los niños y a los católicos proponemos empezar por respetar a las familias de lesbianas y travas, es decir a las nuestras, a los niños y niñas lesbianas y trans, como nosotros, y la religiosidad y espiritualidad de todas aquellas travestis y lesbianas que se sientan creadas por Dios, ya que la libertad de culto tampoco es algo que se pueda censurar.
Del material desmontado los restos de un cartón pintando con témpera fucsia y negra nos recuerdan: «NO HERIR DE TÍTULO NINGÚN PULSO».
Sofía Chaij, tortillera por esfuerzo propio.
Juan Manuel Burgos, Marica por la despenalización del aborto.
 
APARECEN EN ESTA NOTA
·         Juan Manuel Burgos
·         Sofía Chaij